¿En serio quieres ser una madre “perfecta”?
Una perfección tan única como tú
El peque
hace un berrinche en el super, lo primero que te viene a la mente es: ¿Qué va a
decir la gente? Escuchas los consejos de la abuela, la madre, las amigas con
mas experiencia, las revistas, los blogs…y no puedes mas que sentir culpa igual
si eres disciplinaria o débil ante el berrinche ¡Quieres ser la madre perfecta!
Malas noticias: el molde de madre perfecta no existe.
Eres
una persona única e irrepetible, tus hijos también ¿Vale la pena que te
estandaricen las emociones y la vida?
La
maternidad es algo tan íntimo y personal, único como cada persona que existe, nadie puede medir el dolor del primer día de
escuela, la primer caída de un columpio, ni la alegría del primer concierto por
mas que lo cuentes y compitas para demostrar ante las demás “lo buena madre que
eres” solo ‘porque sufres’ o “madre sin entrañas” solo ‘porque eres práctica’. En
el universo sin par de tu cerebro cada emoción es el resultado de emociones
previas, de expectativas si alguna vez alguien te dijo: “vas a sentir tal o
cual cosa” te mintió.
La vida
da a cada quien una cara según cómo la recibe, con visiones reales o no, la
maternidad no es el estado perfecto que te hace más fuerte, clarividente, infalible
o…¡Perfecta!
No
podemos superar a nuestras madres, era otra sociedad (¡otro esposo y otra
suegra!) mujeres en otro tiempo y “otros zapatos” diferentes necesidades
emocionales traducidas en “amor e instinto materno” distintos mapas para llegar
a diferentes paraísos…distintos hijos.
Tu
propio mapa mental: “maternidad”, “realización femenina”, “lapso de vida con
los hijos”, “etapa de crecimiento familiar” …”sufrimiento pasajero” o como
quieras llamarlo es completamente tuya.
Como
todo en la vida: observa, toma lo que sirva y te enseñe. Sé feliz con lo que
hayas decidido. “Tuyas las decisiones …tuyas las consecuencias”
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Dinos lo que salga de tu corazón de madre, de padre o de hijo...